35 años de carrera, 14 millones de discos vendidos, presencia en historietas, telenovelas, dibujos animados, cine, haber sido el grupo de música regional que cambio el paradigma de la música grupera, haber tenido los dos llenos más impresionantes que un artista de música popular ha tenido en la Plaza de Toros México (60 personas) y Estadio Azteca (125 mil), son solo algunas de las credenciales de presentación, y que la verdad salen sobrando cuando hablamos de Bronco, “El Gigante de América”.
Bronco está de vuelta con el disco “Primera Fila” en el que con 19 canciones, el que el Grupo que hasta hace unos meses aún se llamaba Gigante de América y que poco a poco estaba retomando el galope que les caracterizó por dos décadas en las que fueron íconos e ídolos, dan muestra porque la agrupación es el sinónimo de la música regional mexicana, de ídolos populares verdaderos.
Bronco, que recupera su nombre, más no su esencia, y su espíritu, los cuales nunca traiciono, a pesar de las modas impuestas en los últimos años por fenómenos como el estilo duranguense, el alterado o aún peor el reguetón. Bronco es fiel a la cumbia norteña o la balada norteña, géneros que si bien no fue creados por ellos, si fueron popularizados desde que en todo el continente se escucharon los primeros acordes de “Que No quede Huella” y “Sergio el Bailador”, temas emblemáticos que justo ahora serían el único negrito en el arroz de este disco, uno arruinado por los arregles impuestos para introducir a Ilya Kuryaki & The Valderramas; y el segundo en donde un descafeinado cantante, queda humillado ante la potencia de la voz de Lupe, hombre que ha puesto alma e inspiración a las potententes y ritmicas canciones que ya son parte del imaginario colectivo del mexicano.
Mejores resultados tienen las otras tres intervenciones en el disco, primero Julieta Venegas hace una muy buena demostración de acordeón en “Adoro” de Armando Manzanero, aunque su voz corre la misma suerte que la de Larregui. Cristian Castro, que ha crecido enormidades desde aquel lejano 1994 en el que grabo “Nunca voy a Olvidarte”, apela a esa joven nostalgia con su interpretación, su interpretación supera en mucho a las tres previas, y al ser hoy una de las mejores voces de México, se le persona todo, hasta hacerle los coros a Lupe; la mejor lograda de las colaboraciones es la de los niños Lemongrass que sí logra darle un nuevo aíre a emblemáticos temas infantiles como son “El Sheriff de Chocolate” y la legendaria “Los Castigados”.
Bronco logró darle sentido a estos álbumes “1era. Fila”, demuestran que Pese a lo básicos que pudieran parecer los acordes del grupo, y los simple de las jocosas y románticas letras, la música de del “Indomable” demuestra en este disco que ha sobrevivido al paso de los años, que no necesita mayores arreglos, que se adapta perfectamente a las nuevas generaciones, que las letras y los acordes son aceptados por la gente de forma orgánica, pero además demuestran una calidad, aceptable, tal y cómo lo dice Lupe al final del recital “Nunca pediremos aplausos, porque la gente nos los regala”.
Así con este material Seitrak y Sony le regresan al pueblo a sus verdaderos ídolos, a grupo “Salvaje”, “A todo Galope”, “De pura Sangre”: Bronco.