Una de las ventajas que tiene la novela gráfica sobre otro formato de cómic, es la posibilidad que tiene para experimentar, pues al no estar sujeta a un formato o línea narrativa, da más libertades al autor. Este punto queda más que claro en la obra 3 Segundos, del historietista francés Marc-Antoine Mathieu. En este caso, el título no es simbólico, sino que narra una historia que se desarrolla en ese tiempo. Sin embargo, la misma se narra a través de reflejos en diversas superficies, de modo que en cada viñeta se tiene sólo una visión parcial de los hechos, y el lector debe de reconstruirla en base a ello. Es un experimento visual muy interesante, pero quizá d que quizá no resulte atractivo para todo tipo de personas.