Horacio Quiroga (1878- 1937) maestro del horror en la literatura nacido en Uruguay, se considera uno de los grandes exponentes literarios de género en habla hispana. Sus narraciones han poblado las pesadillas de muchas personas a lo largo de varias generaciones, y seguramente lo seguirán haciendo.
Una de las razones que hacen tan efectivas sus historias para producir horror y angustia, es la descripción que hace de lo cotidiano, donde las amenazas acechan sin necesidad de que las animen poderes sobrenaturales.
En sus relatos la locura, la naturaleza salvaje, los monstruos que nos acechan, siempre han estado ahí, pero no siempre abrimos bien los ojos para identificarlos…. hasta que ya es demasiado tarde.
Uno de sus cuentos más conocidos es El Almohadón de plumas, una terrorífica narración publicada originalmente en 1905 en la revista Caras y Caretas y reeditado en la famosa antología publicada en 1917, titulada Cuentos de amor locura y muerte.
El cuento podría considerarse como propio género vampírico, aunque más allá del ambiente sombrío, comparte poco con la idea de los no muertos malditos que están condenados a alimentarse de los vivos.
Leer este cuento es fascinante y quizá es por ello que ha inspirado a artistas diversos a crear adaptaciones para otras formas de expresión.
En esta ocasión les compartimos tres cortometrajes animados, que ofrecen diferentes versiones del cuento. Esperamos que los disfruten… y no olviden revisar bien su almohada todas las noches antes de dormir. Más vale.