Por Lupita y José Alberto, corresponsales de Artes 9 en el Edo., de Hidalgo.
En esta ocasión y con la firme intensión de cubrir la nota de la presentación del pastel más grande del mundo que se elaboraría –que se elaboró, suponemos– en la comunidad de San Sebastián Martir de la hermosa Nopala, — ombligo del reino Otomí– dentro de las festividades patronales comunales. Pero como el mortal propone y el de muy arriba dispone, nuestro transporte ancló por causa de fuerza mayor junto al río Tula, y ya no fue posible, aun remando, llegar ni a destiempo a testimoniar para nuestros internautas la manufactura y degustación del afamado postre de los artesanos pasteleros de San Sebastián. Mil disculpas, pero a cambio, les ofrecemos una semblanza del municipio.
Nopala de Villagrán:
En esta región se siguen encontrando vestigios otomíes como utensilios de cocina hechos de barro, punta de flecha de obsidiana, fracciones de metales, ídolos y restos humanos, estudiados y definidos como del horizonte otomí.
Existen modernos monumentos civiles dedicados a: Don Benito Juárez, Don Miguel Hidalgo y Costilla, Don Vicente Villagrán y a Don Nicolás Romero. También cuenta con importantes monumentos religiosos coloniales como: La Parroquia de Santa María Magdalena terminado en 1620; la Capilla de San Sebastián, ubicada en la comunidad de San Sebastián; la Capilla “El Calvario”, ubicada en la comunidad de San Sebastián Tenochtitlán; la Capilla “El Calvario”, ubicada en la comunidad de Humini” y la Capilla de la Santísima Trinidad, ubicada en la comunidad Maravillas, nos platica un buen vecino de Nopala de paso por Tula, don Miguel Reséndiz Reséndiz..
Como dato adicional, nos informa don Miguel, que existen más de 40 Lienzos Charros en este municipio y destaca la hermosura de las añejas construcciones de las Haciendas como la del Destello, la de Jagüey y la de Dañu, esta última, en la comunidad del Jazmín. Nos comenta que a la fecha, podemos observar varones que visten sus trajes típicos: Pantalón y camisa de manta bordados, sombrero de palma y huaraches, y las mujeres, lucen blusas de bellos bordados y huaraches de diversas formas.
Cuando visiten Nopala, finaliza, encontrarán todavía: metates, molcajetes y figuras de cantera y mármol, vidrio soplado y cerámica. Igualmente: servilletas, manteles, pañuelos bordados y una rica gastronomía donde destacan las cremas, los quesos, dulces de pepita de calabaza y vinos varios. En la cabecera municipal, todavía se aprecia el camino antiguo del paso de las carretas por la que transitó Benito Juárez, también admiren el área verde y el hermoso árbol que exalta la memoria de “El Cura de Nopala” José María Correa, como símbolo de vida, fuerza y libertad. Para muchos, pasa desapercibido, pero ahí se encuentra este árbol desarrollándose con vigor, recordando a pasadas, presentes y futuras generaciones, que busquen siempre la ansiada libertad. En Julio es la fiesta principal en honor a Sta. María Magdalena, remata el señor Reséndiz. Si vivimos; ¡ahí estaremos!, le prometimos a nombre de Artes 9.
De nuestra obligada estancia en la tierra de Quetzalcoátl, incluimos unas hermosas vistas –principalmente de los interiores de la Catedral de San José— algo de lo poco que pudimos apreciar en Tollán (Tula) la capital del reino Tolteca, en lo que esperábamos la solución mecánica del transporte que ahí nos depositó.