El término “Best Seller” se aplica principalmente a libros que han registrado una gran cantidad de ejemplares vendidos, sin que esto signifique que sean obras de gran valor artístico.
Navegando por las páginas de El Universal, nos encontramos con un recuento de los “best sellers” más vendidos en la historia de la imprenta:
– El primero, como muchos pueden imaginar, es La Santa Biblia, el primer libro impreso como tal y con más de 6 billones de ejemplares editados a lo largo de su existencia.
– El segundo es El Libro Rojo, de Mao Tse-tung, máximo líder del partido comunista de China. Editado por primera vez en 1964, hasta ahora se han registrado más de 800 millones de copias vendidas.
– Le sigue El Diccionario Xinhua, otro libro de origen chino, publicado en 1957 y que explica los caracteres de la escritura china. Más de 400 millones de copias.
– Otros dos libros de Mao Tse-tung se mantienen en este nivel: El Poemario de Mao (400 millones de copias) y Artículos Selectos de Mao (250 millones de copias).
– El Coran, libro sagrado de los musulmanes, ha logrado vender más de 200 millones de copias.
– Los únicos libros de ficción considerados en esta lista son Historia de Dos Ciudades, de Charles Dickens (200 millones) y El Señor de los Anillos, de J.R.R. Tolkien (150 millones).
Como nos damos cuenta, la mayoría de los libros en esta lista son los considerados «textos sagrados». Parafraseando a Manolito, ¿por qué no considerar también a los billetes como “best seller”, si son de los que más ejemplares se imprimen y las ediciones que más pronto se agotan?