Aunque los dos comics que la empresa Bluewaters Productions han resultado ser muy exitosos, y hasta beneficiaron las carreras de los incluidos, el abogado Kenneth Feinswog exigió no sólo que se le dejara de publicar y distribuir los comics de sus dos representados, Lady Gaga y Justin Bieber, sino que exigió que todas las copias fueran destruidas, argumentando que resultan dañinas para la reputación de sus clientes.