Como pudieron apreciar los asistentes a la inauguración de Santo de mi devoción, el evento fue un trancazo, reuniendo a cientos de admiradores del enmascarado, así como a más de una veintena de participantes.
Lamentablemente, el título de este post no es broma. Despúes de la gran satisfacción de organizar esta muestra con el apoyo de muchos amigos, tenemos que compartirles una mala noticia:
La noche anterior a la inauguración, en el transcurso de un evento privado que se realizó en Buzón de Arte, dos piezas de la muestra (la de Raúl Valdés y la de Mauricio Herrera) fueron robadas. Ante la negativa de los responsables del foro para aumentar la seguridad en el lugar, hemos decidido suspender la exhibición, ante las nulas garantías de mejora y otras irregularidades demostradas por este supuesto centro de difusión cultural, que demostró estar más interesado en rentar su espacio «artístico» para eventos nocturnos caracterizados por el exceso de alcohol (en los que se pueden encontrar a jóvenes que, o son «traga-años», o de plano son menores de 18 años) y una clara deficiencia de seguridad.