En esta ocasión Los Monitos se engalanan con la presencia de una institución de la historieta nacional, sin mayor preámbulo: Eduardo García del Río, Rius.
JM. Hola, ¿Cuando inicio su carrera, sabemos que Steimberg fue determinante en su labor en la caricatura?
RIUS: Al ver por primera vez los trabajos de Saul Steinberg, en su libro Todo en línea, me sentí como impresionado. No había visto nada parecido a su estilo de dibujo y al tipo de humor que manejaba. Y cuando tuve oportunidad de empezar a hacer monos, casi casi calcaba su trabajo. Mis primeros monos en Ja-já tienen mucho de Steinberg (pero pésimamente dibujado) y lo sigo considerando, junto con Abel Quezada, como mis mayores influencias…
JM. ¿Como ingresó al Ja-já?
RIUS: Ingresé al Ja-já en 1954 por pura chiripada. Trabajaba yo en Gayosso como telefonista y mi porvenir parecía estar en la funeraria, pues los dueños me iban a mandar a aprender embalsamamiento y demás a San Louis Mossouri, hasta que llegó un día don Pancho Patiño -director de la revista- a pedirme el teléfono para hacer una llamada, mientras yo mataba el tiempo haciendo dibujitos -no caricaturas- y al acabar su llamada me dio su tarjeta, diciéndome que cuando se me ocurrieran algunos chistes se los llevara. Y así fue: a la semana ya estaba yo colaborando con Ja-já y un años después me había decidido por la caricatura y dejé a los muertos por la paz…
JM. ¿Cómo se le ocurrió la idea de un indio con cobija electéctica, llamado Calzoncin?
RIUS: Lo de Calzónzin y su cobija eléctrica son de esas cosas que se ocurren -no sé ni cómo- cuando está uno haciendo historieta, como otro chiste cualquiera.
JM. ¿Cómo logró formar La Garrapata?
RIUS: Después que salí de SUCESOS donde hacía el suplemento de humor «El mitote ilustrado», ya estaba yo haciendo Los Agachados. Y un día, motivados por lo que estaba pasando en 1968, el editor Mendizabal y yo, pensamos la necesidad de hacer una revista de humor político, contando ya con la experiencia del Mitote en donde habían colaborado todos los que hicimos después La Garrapata: Helio Flores, Naranjo, AB, Checo Valdés y otros. Fue una experiencia interesante, porque cada uno de los 4 directores (Helio, AB, Naranjo & me) dirigíamos un número completo como el Borras, pero aprendimos muchísimo y creo que fue una buena revista.
JM. ¿Platíquenos de su relación con Chávez Peón y Naranjo haciendo los Supermachos?
RIUS: La colaboración de Naranjo no se dio, porque resultaba muy lento su trabajo ante la necesidad de hacer semanal la revista. Con Chávez Peón sí trabajamos juntos varios meses, hasta que salió la revista DUDA donde fue uno de los moneros estrellas.
JM. ¿Es cierto que terminan los Supermachos regresando Calzoncin a su cerro a vivir?
RIUS: Creo recordar que al terminar el num. 100 de los Supermachos, ya sabiendo que se acababa mi participación con el bribón de Colmenares, decidí mandar al cerro a Calzónzin y recuperarlo después para otra historieta, cosa que no se logró por las pillerías del editor que me despojó de mis personajes.
JM. ¿Fue muy difícil para ud. recrear una nueva historieta después de los Supermachos?
RIUS: Fue un poco difícil hacer otra historieta, porque en una semana tuve que crear nuevos personajes; pero la práctica de haber hecho 100 nums. de Los Supermachos me permitió salir airoso del paso, y siento que Los Agachados, en muchos aspectos, fue mejor que la anterior, aunque siempre hay que considerar que «nuca segundas partes fueron buenas». En los Super…echaba yo más relajo, pero tuvo más influencia Agachados, siento.
JM. ¿Por qué rompió con Fidel Castro y que experiencia te dejo visitar cuba recientemente?
RIUS: Empecé a romper con Fidel Castro en 1968 cuando el Comandante aplaudió la invasión soviética a Checoslovaquia y se cargó del lado soviético en cuerpo y alma. Les vendió la revolución cubana con todo e isla. Eso y la ausencia de libertades (de prensa sobre todo) y el aniquilamiento que hizo Fidel de la caricatura cubana, más otras cositas por el estilo, me obligaron a «pintar mi raya» para no sentirme cómplice de las múltiples barbaridades y metidas de pata de don Castro. Y lo manifesté en el libro «Lástima de Cuba»; Y de veras lástima, porque esperábamos mucho más y mejor de la revolución cubana, que se ha convertido en una mala caricatura del peor socialismo…
JM. ¿Cómo se formó el Chahuistle?
RIUS: El Chahuiste nació cuando el hijo de Guillermo Mendizabal, Fernando (un pillo corrupto) me pidió que le volviera a hacer la historieta. Yo le reviré proponiéndole mejor una revista para hacerla entre tres moneros (El Fisgón, Helguiera and me ). Creo que nos quedó bien chida, pero nos tiopamos con un editor que no sabía nada de nada, excepto robarnos alegremente. Luego hicimos El Chamuco, añadiendo a Patricio y Hernández a la direccdión colectiva. Actualmente, yo estoy solo colaborando, sin participar en la dirección.
JM. ¿Le afecto la muerte de Fontanarosa?
RIUS: La muerte de Fontanarrosa me pegó muy duro, porque éramos muy amigos y sobre todo, porque se perdió con su muerte a uno de los mejores humoristas que ha dado la Argentina y el mundo.
JM ¿Por qué cree que nadie se anima a hacer una nueva historieta política en México?
RIUS: Nadie se anima a hacer otra historieta política, porque es una chinga hacerla; pero sobre todo, creo que por falta de editores. Nadie se anima hasta horita a arriesgar sus centavos patrocinando una historieta política. Creo que es culpa de ambos tres, que diría Fox: no hay moneros que la quieran hacer, ni editores que la quieran patrocinar.
JM. ¿Para cuando su nuevo libro sobre los pederastas?
RIUS: El libro sobre los pederastas y compañía de la iglesia católica mexicana (se llama: ¿Jesucristo sería católico? ) está ya en prensa.
JM. ¿Por qué firmaba como homobono?
RIUS: Lo de Homobono como seudónimo de otro estilo de monos, lo usé cuando en La Prensa Manuel Buendía que era el director, me conminó a dejar de hacer cartones para POLITICA. O los hace para el periódico, o para Política, pero no para las dos. Entonces «inventé» otro estilo y con ese seudónimo seguí colaborando en la revista, hasta que me corrieron de La Trensa. Por cierto, no tengo ningún original, ni copia vil, de los monos que hacía Homobono.
JM ¿Es verdad que el Ché le pidió que le firmará sus cuentos de los agachados?
RIUS: El Ché nunca me pidió autógrafos, al contrario, todavía conservo el libro que me obsequió con su firma. En varios libros he contado cómo fue el encuentro y la impresionada que me dio al preguntar por mí.
JM. ¿Qué aprendió de Diego Rivera?
RIUS: A Diego Rivera lo traté muy poco. Lo veía pintar en Palacio, porque mi mamá trabajaba en Hacienda. Después lo vi varias veces, sobre todo en la última etapa de su vida, casado con Emma Hurtado, que era madrina de Rosita W, mi primera esposa. Siempre lo he admirado, como pintor y como ser humano.
JM, ¿Por qué salió de El Universal?
RIUS: Me corrieron del Universal por haber hecho un suplemento infantil (Mi mundo) dedicado a la revolución soviética. Yo no sabía que el suplemento, bastante inocente por cierto, lo financiaba la Embajada de los USA…
JM. ¿Por qué se distanció con Magú?
RIUS: Con Magú nunca he estado distanciado, más que por la distancia entre el DF y Tepoztlán. Nunca hemos sido así cuatachos, pero no estamos peleados ni nada por el estilo. Con los otros Chamucos sí sé que no se llevan bien.
JM ¿Qué opina de sus hijos putativos: El Fingón, Patricio, Hernández y Helguera?
RIUS: Todos los Chamucos tienen mucho talento, tengo que reconocerlo apenado..juar,juar. Con el que más me río es con Patricio, y al que más admiro en su dibujo es Toño Helguera.
Muchas gracias. Y con esto nos depedimos de uno de los caricaturitas/historietistas más importantes de México.
–