Soul. USA (2020)
- Dir. Pete Docter, Kemo Powers
- Reparto (Voces): Jamie Foxx, Tina Fey, Kem Powers
En un año tan convulso y atípico, Disney y Pixar deciden cerrar sus estrenos del 2020 con la muy esperada cinta de Peter Docter, (director de Monster Inc, Intensamente y Up) conscientes de que con solo nombrar al director tres veces ganador del Oscar, se abrían altas expectativas para un nuevo éxito taquillero y comercial a nivel internacional.
Sin embargo, como muchas otras cosas en este año, la pandemia frustró el estreno en salas de la cinta -que se había pensado como uno de los blockbusters de verano- aunque eso no fue obstáculo para que la nueva plataforma Disney se alzara en suscripciones derivado del interés por ver la película, junto con otros contenidos que también vieron cancelado su estreno en salas
No obstante, los abruptos cambios de planes no parecieron desanimar el proceso de renovación que Pixar había emprendido anteriormente con algunas de sus últimas entregas. El estudio parece haber decidido desarrollar una estrategia diferente con nuevos contenidos y dedicada a un público más adulto. Sin abandonar el nicho familiar – la fuente de sus grandes ingresos en taquilla- las últimas películas que nos han mostrado han ido desarrollando contenidos más complejos y con mensajes más profundos.
Quizás haya sido que cayeron en la cuenta de que los niños y niñas que crecieron con sus historias hoy son personas adultas. Y que en este mundo tan cambiante y falto de sentido, una guía de mensajes positivos, al parecer no sale sobrando.
Ya desde Intensamente, Docter había incursionado en el resbaloso terreno de hacer animación con contenidos más maduros y complejos sin olvidarse que hay niños y niñas presentes en la sala. Soul podría considerarse otro intento en el mismo sentido, aunque con un enfoque diferente. Si en Intensamente la idea era explicar la psique y las emociones, aquí vamos un poco más allá, tratando de dilucidar lo que es la conciencia de uno mismo.
Para ello, utiliza un recurso que no es en modo alguno novedoso, pero suele resultar efectivo. No son pocas las películas que abordan en tono de comedia la segunda oportunidad al filo de la muerte para apreciar mejor la vida. De entrada me vienen a la mente Más allá de los sueños (V.Ward, 1988) o algunas donde se reencarna en algo nunca esperado como Mi papá es un gato (B.Sonnefeld, 2016) y en fin, seguramente las lectoras y lectores ubican alguna con la misma temática. Incluso reconocemos algo del famoso Cuento de Navidad (Christmas Carol) que ha sido llevado a la pantalla en innumerables ocasiones.
Docter elige para desarrollar esta idea a un profesor de música en una secundaria, cuya vida monótona y aburrida, se ve un día transformada por el golpe de suerte que lo llevaría a cumplir su sueño de tocar en una banda de jazz, al lado de una gran estrella. Este planteamiento dura muy poco en la cinta, ya que muere repentinamente y la escena cambia cuando en el limbo entre la vida y la muerte, debe ser mentor de un alma que por siglos ha decidido no vivir una experiencia terrenal.
Y si llegado a este punto, anticipan el final, lo más probable es que estén en lo correcto. La película se resuelve en los primeros minutos, aunque nos desvíen hacia una frontera entre lo místico y secular.
Místico porque se ocupa del principal misterio en la historia de la humanidad (¿Qué pasa cuando morimos? ¿qué pasa cuando nacemos?) y secular, porque lo presenta desprovisto de espiritualidad, burocratizado y con agenda, muy al estilo de la gran empresa en Monster Inc, o protocolizado como en Intensamente. Y no estoy segura de que llegado a este punto, el mensaje importante sea transmitido de una manera adecuada. Quizás se confunde entre la cura del aburrimiento y lo sabrosa que es una rebanada de pizza.
Pero unir esas complejas reflexiones no es problema para Pixar, por lo que a pesar de los evidentes huecos narrativos, se continúa en la historia para terminar como se anticipa desde el inicio, todo ello en medio de una animación poco más que asombrosa y la musicalización magistral de Trent Reznor.
Soul es una película entretenida para toda la familia, un contenido necesario en un año tan complejo. Ese quizás sea el secreto de su éxito, y de alguna manera, se agradece que nos permita reflexionar sobre la vida y sus posibilidades. Pero da la impresión que Pixar también anda en busca de recuperar su propia chispa, su propósito, al igual que el protagonista de la cinta. Mi mejor deseo es que lo encuentren pronto.