El emporio de entretenimiento Disney enfrenta una severa crisis, pues se descubrió que una de sus empleadas, Bonnie Hoxie, asistente de uno de los jefes de información, estuvo filtrando datos importantes de forma regular. Hasta ahora, no se ha podido contabilizar un recuento de daños, pero esta situación podría implicar un cambio completo de los calendarios. De hecho, uno de los primeros problemas se reflejo en la bolsa, pues cuando se supo de esta situación, las acciones de la empresa cayeron un 4.7 %.