Muchos de nosotros posiblemente recordaremos la fiebre de los especuladores de los noventas, que prácticamente inundaron el mercado de revistas que muchos esperaban revender, y como esa estrategia acabó reventando por su propio peso. Sin embargo, ahora parece que la idea de las historietas como medio de inversión está volviendo, pero de una forma muy distinta: Muchos particulares están tomando sus ahorros y los usan para comprar revistas que ya están valuadas actualmente, y las conservan como una forma de hacer crecer su dinero. Curiosamente, en una época en la que las bolsas y otros recursos se han vuelto terriblemente inestables, las viñetas están colocándose como una solución más segura.