Germán Horacio Robles, Gijón, Asturias, España, 20 de marzo de 1929.
José Alberto, Corresponsal Viajero de Artes9.com y Archivo Cultural BENYCA.
Germán Horacio Robles, el único vampiro Asturiano/Mexicano que aterrorizó al mundo, llegó a México en 1946 y debutó en el teatro en 1952, gracias a Enrique Rambal, en la obra “El Martir del Calvario”, qué contraste, primero mártir después terrorista chupasangre. El inolvidable actor, nació en la tierra de mis antecesores europeos, Gijón, Asturias, España, el 20 de marzo de 1929, hijo de un pintor de carteleras de cine y nieto de un actor con ideas de izquierda y escritor.
Entre 1957 y 1958 fue cuando hizo sus famosas películas de terror, filmó El Vampiro en 1957 –con Abel Salazar en la producción–, personificando a Karol de Lavud (Duval), para luego en el 58 filmar “El Castillo de los Monstruos” y “El Ataúd del Vampiro”, historias que cuando las platicaba le brillaban los ojos de felicidad porque gracias a esos vampiros su nombre y carrera trascendieron. Por esas personificaciones se convirtió en estrella del cine de terror, especializado en la temática vampiresca terrorífica y fue toda una institución en la industria mexicana del cine del espanto , era considerado en el mundo como el Maestro del Terror, tanto, que se ha ganó un espacio en el Museo del Terror de Nueva York.
En teatro prefería el género de las grandes novelas clásicas, ahí trabajó en “Los hermanos Karamazov” o “La dama de las Camelias”, con Dolores del Río, “Luces de Bohemia” y durante 13 años interpretó el personaje de Arthur Kipps en “La Dama de Negro” de Susan Hills, puesta en escena que este 2015, llegó a la mayoría de edad, 21 años de estar en cartelera.
En el 2008 libró la muerte que le estaba provocando una úlcera en el esófago gracias a donaciones de sangre que en cascada le hicieron sus alumnos de la escuela de actuación “La Mascarada”, fundada por Don Germán y su esposa Ana María Vázquez. Al recuperarse medianamente de este problema, en cordial platica con los reporteros les comentó que todo lo relacionado con la hemoglobina lo perseguía siempre, que la sangre, era su piedra de toque que lo perseguiría a través de su historia de vida y muerte, y así va a ser, pero no con letras de sangre sino con letras de oro, su nombre ya está inscrito en la historia del Cine, del Teatro y la TV., mexicanas y del mundo.
Descanse en Paz, el Vampiro más caballeroso en la Secta Satánica de la historia truculenta del mundo del terror cinematográfico, Los Vampiros de Coyoacán están de luto, Rocambole y la Nahuala, también le lloran, en Cuernavaca se murió la primavera, Las Flores del Jardín de la Tía Isabel, se marchitaron, El Recuerdo de Xochimilco se olvidó y La Trampa para un Cadáver se cerró. Esa trampa no la abren ni el Enmascarado de Plata, ni el Jinete de la Divina Providencia.