Barbie. USA 2023.
Dir: Greta Gerwig
Reparto: Margot Robbie, Ryan Gosling, América Ferrera, Will Ferrell, Kate McKinnon.
Poco a poco cocinándose lentamente, la mesa en color rosa quedó servida para el fenómeno Barbie. Para su aparición en cine, la famosa muñeca no se conformaría con romper la taquilla mundial: también aspiraría a ser un fenómeno de mercado para la venta de ropa, juguetes y demás artilugios; y no sólo eso: también erigirse como el tema de moda para la polémica que mantendría animados tanto a fans como a detractores en pláticas de café y sobremesa, cumpliendo el más alto anhelo generalizado de nuestra época: no pasar desapercibida.
Barbie es antes que todo un experimento sin duda, exitoso. Encontró la fórmula para actualizar el legado de una muñeca que dice poco a las nuevas generaciones, pero que es entrañable para las anteriores. Redefiniendo el concepto y aceptando sus errores – que no enmendándolos- la Barbie de carne y hueso está lista para ser la punta de lanza de un nuevo modo de hacer cine comercial.
Porque sí, amables lectoras y lectores. Esto no ha hecho más que empezar. Una vez agotado el nicho de los superhéroes, que a últimas fechas sólo ha dado bandazos en taquillas, viendo a Pixar y Disney desplazados de los grandes blockbusters de animación, y cuando el solo nombre de Indiana Jones no fue suficiente como para pagar una entrada; es porque ha llegado el momento de explorar en otra parte.
Y es así que una vez comprobado -gracias al enorme éxito de Super Mario Bros, la Película- que el de los juegos y los juguetes era un enorme nicho de mercadotecnia, el siguiente paso era encontrar la fórmula ideal para hacerlo.
No es que no hayan intentado hacerlo antes, pero quizás no habían entendido algo fundamental: atrás de video juegos y juguetes, no hay historias. Hay vivencias, emociones y experiencias. Y es por ello, que tanto Mario Bros como Barbie, se acercaron lo más que pudieron a recrear la sensación que experimenta alguien cuando juega el video juego o lo que sentia cuando jugaba con una muñeca Barbie.
Es por esta razón que la recreación del mundo de Barbie en la película, va más allá de una escenografía rosa. La cinta se hace preguntas claves en cuanto a las emociones que la muñeca lograba explotar en varias generaciones de niñas y mujeres, mismas que van desde el modelo aspiracional, hasta el juego rudo.
Barbie acierta cuando es crítica consigo misma, y entiende que no les habla a las niñas, sino a las mujeres que la recuerdan como un estereotipo inalcanzable.

Hay que decir también que la cinta es una sátira inteligente, que pone sobre la mesa de manera brillante temas como el machismo, el patriarcado, la masculinidad frágil, los roles de género. Pero no abunda en otros, como la diversidad, el clasismo, la violencia o la discriminación. Si, quizás era mucho pedirle a un blockbuster de verano, pero fueron ellos quienes abrieron la puerta como para después quedarse a la mitad.
Es por lo que, con todo, no logra que nos olvidemos de lo obvio: se trata de una crítica hacia la mercadotecnia, que se hace mientras nos vende más muñecas, ropa y accesorios. Ni tampoco de algo mucho más obvio: hay Barbies diversas, pero sólo una es la principal, la de siempre, la que se aparta del resto de las mujeres, niñas y jóvenes comunes.
Ello no obsta para reconocer el excelente trabajo de Margot Robbie que nos regala una Barbie con matices, una Ryan Gosling que se lleva los mejores momentos de la cinta y un diseño de producción cuidado y deslumbrante que incluye a Rodrigo Prieto en la cinefotógrafia. Greta Gerwing hace un gran trabajo que sin duda será protagonista en la siguiente temporada de premios. Y se agradece que pudiendo hacer la historia cliché de siempre, hayan querido arriesgar algo más.
Es pronto todavía para saber que tan trascendente habrá sido el esfuerzo. Hay que esperar que se genere una discusión en lo cotidiano acerca de si estas son las historias que queremos que nos cuenten. Y si la revolución en Barbieland, es tan potente como para traspasar la frontera de lo imaginario. Esperaremos pues, a que esa rebelión rosa, llegue de verdad al mundo real.